Expertos en emergencias se capacitan sobre la atención a migrantes en situaciones de crisis

 
28 Julio, 2017

Cinco talleres nacionales sobre integración de los migrantes en los sistemas de preparación, respuesta y recuperación en situaciones de emergencia lograron capacitar a más de 100 funcionarios de organizaciones estatales, organizaciones de la sociedad civil, gobiernos locales y líderes migrantes comunitarios en México, Nicaragua y Costa Rica.

 

Estos talleres son implementados como parte de las acciones de la Iniciativa Migrantes en Países en Situaciones de Crisis (MICIC), impulsada en la región por la OIM a través del Programa Mesoamérica. La Iniciativa, liderada por los estados, busca mejorar la capacidad de los diversos interlocutores involucrados en la preparación, respuesta y recuperación a desastres, para salvar vidas y proteger  a las personas migrantes que a menudo quedan más vulnerables y desprotegidas que los nacionales.

La región de Mesoamérica es especialmente vulnerable a los desastres naturales. Según el Índice de Riesgo Mundial de 2016, Guatemala, Costa Rica, El Salvador y Nicaragua hacen parte de los 15 países con mayor riesgo de sufrir desastres naturales y quedar devastados. De ahí la importancia de que los países y sus instituciones se preparen asertivamente ante las situaciones de emergencia, tomando en cuenta en estos ejercicios a las personas migrantes.  

En Nicaragua, se realizaron dos talleres: uno en la capital, Managua y otro en el Departamento fronterizo con Honduras, Chinandega. En este último, participaron representantes de las instituciones Miembro de la Mesa Departamental contra la Trata de Personas en Chinandega, así como representantes de la Cruz Roja, Ejército Nacional, Dirección General de Bomberos y organizaciones de la sociedad civil. Según expresó el Delegado Departamental de Gobernación de Chinandega, Fanor Herrera, este tipo de capacitaciones viene a fortalecer la organización interinstitucional y por ende la seguridad del país.

“Felicito a todas y todos los compañeros que nos han acompañado en este proceso, sabemos que vendrán nuevos retos y nuevos compromisos y sé que con esos conocimientos están dispuestos a responder ante cualquier situación de crisis o emergencia y salvar vidas”, concluyó el delegado.

 

En Chiapas, en el sur de México,  la OIM implementó otros tres talleres durante los cuales fue capaz de posicionarse como una fuente de apoyo experto en asistencia en tiempos de crisis entre los participantes. La inclusión de expertos, por ejemplo del PNUD y miembros de todos los niveles de gobierno, la adaptación del material producto de una iniciativa internacional al contexto nacional y el fomento de la creación de redes entre los participantes fueron identificados como buenas prácticas.

Para Costa Rica, país que en el 2016 vivió la crisis del huracán Otto, resultó importante reunir a representantes locales de los Comités de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) así como a líderes migrantes que habitan en el norte del país, zona particularmente afectada por el huracán. Como principales conclusiones destacaron la necesidad de colaborar más estrechamente entre instituciones en todos los niveles (local-local; nacional-nacional; nacional-local) y de contar con un plan de contingencia para la preparación y respuesta ante una emergencia.

Otros retos identificados fueron en cuanto a las herramientas institucionales para el manejo de albergues y bodegas, la necesaria capacitación para la gestión de las emergencias, incluyendo la atención psicosocial y el auto cuido. Finalmente, la identificación de migrantes líderes y su incorporación en grupos voluntarios relacionados con la atención de emergencias fue recomendada.

Con el fin de complementar estas capacitaciones presenciales, OIM lanzará en los próximos meses un curso virtual sobre la temática. Esta iniciativa se enmarca en el Programa Mesoamérica, implementado desde el 2010 con el apoyo financiero del Departamento de Estado de Estados Unidos. El  propósito del Programa es fortalecer las capacidades de los gobiernos y de las organizaciones de la sociedad civil para mejorar la protección y asistencia a las personas migrantes en situación de vulnerabilidad.