Países de América Central y del Norte construyen una estrategia conjunta contra el tráfico ilícito de migrantes con el apoyo de la OIM y de la UNODC

 
9 Abril, 2018

El Director Regional para Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de la OIM, Marcelo Pisani  dio las palabras de apertura del encuentro regional, junto con representantes de UNODC y los Gobiernos de Panamá y Costa Rica.

 

San José – Sesenta representantes de los 11 Estados Miembros de la Conferencia Regional sobre Migración (CRM) se reunieron en San José, Costa Rica, entre el 13 y 14 de marzo 2018 para promover políticas y acciones estratégicas en conjunto, a mediano y largo plazo, para combatir el tráfico ilícito de migrantes, una industria que mueve miles de millones de dólares. 

La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) estima que dos de las principales rutas de tráfico – que van desde la región norte, este y oeste de África hacia Europa y desde América del Sur hacia América del Norte – generan aproximadamente US$6.750 millones por año para los traficantes de migrantes. Estos criminales se enriquecen mientras sujetan a los migrantes a peligros que incluyen el robo, el abuso sexual, la trata de personas, el secuestro, el reclutamiento forzado de parte de los carteles de droga, e incluso la muerte debido a condiciones inhumanas a lo largo de las rutas migratorias. 

El taller regional busco aportar los insumos necesarios para el desarrollo de un plan de trabajo regional de lucha contra el tráfico ilícito de migrantes, por primera vez en este espacio, para fortalecer la coordinación regional, establecer objetivos regionales comunes en cuanto a la lucha contra el tráfico de migrantes – incluyendo la protección de los más vulnerables – y permitir el desarrollo de procedimientos operativos estándares.

En el año 2016 la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) desarrolló y presentó una serie de recomendaciones a la Conferencia Regional para las Migraciones para fortalecer la estrategia regional contra el tráfico de migrantes y la trata de personas. El establecimiento de un plan de acción contra el tráfico fue una de esas recomendaciones.

“Si bien es indiscutible que cada país en la región ha hecho avances destacables – en relación a los procesos de inteligencia y a la promoción de la cooperación por medio de la implementación de varios esfuerzos regionales – deben implementarse objetivos y acciones regionales comunes a mediano plazo, los cuales deberán fortalecerse en el marco de una estrategia regional,” dijo Marcelo Pisani, Director Regional de la OIM para América Central, América del Norte y el Caribe. 

Gisela Yockchen, Directora General de Migración de Costa Rica, hizo hincapié en que “solamente con un claro compromiso político y con un enfoque regional podremos encontrar soluciones que promuevan la migración regular y segura. Este plan de trabajo fortalecerá un enfoque común de nuestros gobiernos para combatir las redes vinculadas al crimen organizado y al tráfico de migrantes.”

Al taller asistieron fiscales que trabajan en delitos asociados al tráfico ilícito de migrantes, como así también funcionarios de policía y de inmigración de Belice, Canadá, Costa Rica, República Dominicana, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Panamá.

Esta reunión fue organizada por la CRM (también conocida como el Proceso de Puebla), un mecanismo multilateral para coordinar políticas y acciones relacionadas con la migración en los 11 Estados Miembros. El evento fue posible gracias al apoyo del Programa Mesoamérica de la OIM, financiado por la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado de EE.UU., como así también por el Programa de Fortalecimiento Institucional Anti Delito del Gobierno de Canadá.